Nuestra defensa de base comienza con USTED: su poder para generar cambios positivos a nivel estatal y federal para presentar y apoyar leyes que mejoren las vidas de los millones de personas afectadas por la diabetes. Cuando aprovechamos nuestra fuerza en números, influenciaremos a nuestros legisladores para que hagan que la insulina y los medicamentos sean asequibles, erradiquen la discriminación en los entornos laborales y escolares, aborden las barreras a la salud desigual y mucho más. Pero necesitamos que todos (personas que viven con diabetes, seres queridos, personas en riesgo de desarrollar diabetes, profesionales de la salud y otras personas afectadas por la diabetes) se unan a nosotros.